Ubicada en el tranquilo campo de Jesús Pobre, esta encantadora casa rústica ofrece una vida rodeada de naturaleza, con vistas a la montaña y el suave canto de los pájaros en el aire. Aquí podrá disfrutar de una verdadera serenidad, estando a tan solo unos minutos en coche de Dénia, Jávea y las hermosas playas de la Costa Blanca.

En el interior, la propiedad conserva la calidez y el carácter de una vivienda rústica tradicional, con abundante luz natural, vigas de madera vistas y un diseño que conecta las estancias de forma armoniosa. La casa cuenta con dormitorios acogedores, zonas abiertas y luminosas, y una cocina que se abre directamente al salón y al comedor. Cada rincón refleja calma y autenticidad, ideal para quienes buscan un estilo de vida sostenible o autosuficiente, cerca del pueblo pero con total privacidad.

En el exterior, la amplia parcela invita a reconectar con la tierra. Hay terrazas para comer al aire libre, rincones sombreados para descansar y mucho espacio para disfrutar de los árboles frutales existentes o ampliar el jardín en armonía con el entorno. Es un hogar perfecto para los amantes de la naturaleza, la tranquilidad y la independencia.